Presentación
Las organizaciones se han visto abocadas a lleva a cabo ágil transición con sus equipos para trabajar de forma remota. Si bien esto ha significado un inmenso reto de adaptación tecnológica, aún más importante y complejo es la adaptación personal y de los equipos. Esta transición del modo presencial al virtual requiere prestar atención a las personas como componente esencial de los equipos y de la organización.
A pesar de en general, toda transición supone un desafío, dadas las circunstancias y pensando en un futuro que ya está aquí, vale la pena aprovechar los beneficios del trabajo remoto: bien llevado, podemos disponer de equipos más creativos y más productivos.
Por ello es necesario, reflexionar y formarse para sacar lo mejor de los equipos de trabajo, siendo consciente de las particularidades, de las adaptaciones necesarias tanto en metodología de trabajo como en competencias personales y de relación.